Es el relato de un hombre el cual
desde muy pequeño sentía un gran sentimiento hacia los animales, siempre de la
mano y encariñado con ellos. Un sentimiento tan puro el cual lo llevo a
convivir desde muy corta edad con ellos, pero que al pasar de los años cambio
al igual que su temperamento.
Ya en una edad adulta, casado y
con una gran variedad de animales, distintos factores y en especial su problema
con el alcohol lo hicieron cometer un hecho fatal para sí mismo, este hombre
cansado de su gato primeramente decide atacarlo, lastimándoles un ojo y
dejándolo tuerto. Al ver que el gato sigue actuando de la misma forma, no
conforme con el acto barbárico que había cometido, decide arrebatarle la vida
colgándolo de un árbol al lado de su casa.
Gracias al remordimiento del acto
cometido, decide buscar un gato que quite la ausencia del que fue asesinado,
así fue que en una noche de tragos encontró un gato casi idéntico, lo único que
lo diferenciaba era una mancha blanca que se encontraba en el pecho de este. El
hombre decidió adoptar al gato, pero al ver el parecido con el gato negro que
había asesinado y el cariño que le había cogido su esposa, empezó a tenerle un
odio indescriptible.
Un día este gato influenciado por
la rabia que le tenía su dueño lo ataco, y este hombre acompañado de su esposa
decidió matarlo con un hacha que tenia a la mano, el hombre mando su ataque
pero el gato pudo esquivarlo gracias a la ayuda de la esposa de este la cual no
quería que muriera el gato, el hombre cegado por su rabia ataco a su esposa y
con un hachazo en la cabeza le quito la vida. Al ser consciente de que cometió
un delito, pensó en la manera más eficaz de ocultar el cuerpo y evitar ser
descubierto, así que enterró a su esposa en la pared del sótano de la casa
donde habitaba. Al pasar los días, este hombre vio que el gato que había
esquivado su ataque y que era muy parecido al gato negro que había ahorcado en
un árbol no aparecía se torno muy feliz, aunque de igual forma también la
policía empezó hacer investigaciones sobre la desaparición de su esposa. Un día
en una inspección, estos decidieron buscar en el sótano de la casa, pero
gracias al eficaz trabajo del hombre no encontraron nada, pero al momento de
irse a causa de los alardes del hombre por el buen trabajo al enterrar a su
esposa empezó a sonar un llanto en el sótano, cada vez más fuerte, esto hizo
que los detectives fueran de nuevo allí, encontrando consigo dos cuerpos, uno
el de la mujer, el otro el del gato negro que fue ahorcado, y al lado de ellos el
gato que alcanzo a huir del hombre, del cual emanaba dicho llanto.
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